lunes, 14 de octubre de 2013

Un padre denuncia al IES Marratxí (Mallorca) por presionar a sus hijos

  • Ha cambiado a su hija de instituto por las presiones hacia sus hijos
  • Pide a la consellera que haga cumplir la ley
  • Al director no le consta la denuncia

Un padre ha denunciado al equipo directivo del instituto público de Marratxí por cometer presuntamente un abuso de poder y graves irregularidades durante las tres semanas de huelga de profesores. El centro educativo prohibió avanzar materia  (pese a haber profesores dispuestos a dar clase), insultó a los estudiantes que no secundaron la huelga (entre los que se encontraba su hija), llamándolos esquiroles, y presionó a los padres para que no llevaran a sus hijos al colegio.
La gota que colmó el vaso ocurrió el pasado viernes cuando su hija le llamó llorando pidiéndole que la cambiara de colegio después de discutir con su profesora de inglés porque ésta no quería dar clase alegando que estaba de servicios mínimos. «La niña le contestó que podía dar clase igualmente porque no tenía que cuidar a nadie, de hecho habían asistido casi todos los profesores para cobrar el día de huelga,pero ella respondió que sería injusto para los alumnos huelguistas», relata.
Finalmente, la familia se ha visto obligada a cambiarla de instituto y ha interpuesto tres denuncias relatando los hechos, donde ha pedido a la consellera de Educación, Joana Maria Camps, que «adopte con carácter urgente las medidas legales a su alcance» para garantizar el derecho de sus otros dos hijos, que también estudian en este colegio.
«Señora Camps, han tocado lo intocable, mis hijos, y ahora sólo confío en el ejercicio de su responsabilidad como consellera»,advierte el padre, desencantado con la Administración. Dice que ha aportado denuncias, pruebas e incluso ha hablado con Inspección Educativa, pero «nadie hace cumplir la ley».
En su escrito de denuncia, J. P. explica su particular odisea: presiones por parte de la asociación de padres para no llevar a los niños al colegio y secundar la huelga, prohibición expresa del director de avanzar temario, peticiones por parte de los profesores para que los alumnos no acudan a clase e, incluso, la orden de vaciar un aula para que el director atienda a la televisión.
Él mismo asistió el día 2 a una charla de la asociación de padres que, «curiosamente, estaba
presidida por dos profesores del centro». «Uno de los docentes expuso las ventajas de la huelga y solicitó reiteradamente a los padres que estuviéramos unidos a la causa y que no lleváramos a los niños al colegio el jueves y viernes para ellos poder cobrar. Luego acordaron destinar 600 euros a la caja de resistencia de los profesores huelguistas, aunque sólo éramos 90 padres presentes de los casi 1.000. Cuando preguntamos si el resto de días darían clase, dijeron que no podían asegurarlo pero que se encargarían de que no se avanzara materia para que los niños que no asistieran no perdieran clase, ya que era lógico y de ética», explica.
Al padre le llamó la atención que en ningún momento se informara sobre el decreto de tratamiento integrado de lenguas (TIL) y «sólo hablaran de ratios, becas y pérdida de la calidad de la enseñanza».
A las presiones a los padres se suman las dirgidas a los niños. El colmo fue el viernes cuando ningún maestro hizo huelga pero se negaron a avanzar los temarios. En 2º de Bachillerato, la profesora de inglés puso una película y el maestro de tecnología de 2º de ESO se presentó en el aula diciendo: «Chicos, no estoy psicológicamente preparado para dar clase», pese a que el resto del tiempo se dedicó a explicar «las bondades de la huelga», critica J. P., que reúne varias pruebas que corroboran su denuncia.
Este diario se puso en contacto con el director del IES Marratxí, quien matizó que no ha impedido dar clase sino que pidió que se hiciera «en función del sentido común y según los criterios pedagógicos». Según explicó, si no hay un número suficiente de alumnos no se puede dar clase «por mucho que lo diga la consellera», se refirió en alusión a la orden de Camps de que los centros den clase aunque haya un solo estudiante en el aula. El director no tiene constancia de la denuncia, aunque hizo sus suposiciones, y se ofreció a hablar con él «si tenía alguna queja». Negó que hubiera desalojado un aula para atender a la prensa y defendió la actuación de los profesores. «Yo siempre cumplo la ley», reiteró.
El Mundo

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Actualización, 7 de mayo 2014:

Archivan la denuncia contra el director del IES Marratxí