Cataluña como sinónimo de mentira
Por Juan García Sentandreu
Escritor y Jurista*
“Hoy, más de mil años después,
la ambición de la clase política catalana
tiene las mismas aspiraciones feudales
que cuando dependían de la corona carolingia y francesa”.
La Cataluña nacionalista es, toda en sí, una gran mentira. No voy a atreverme a hacer este tipo de manifestaciones sin aportar las correspondientes pruebas. Mi formación y experiencia de jurista me lleva a probar todo lo que digo.
La Cataluña actual es una gran mentira en diversas dimensiones: En una dimensión histórica; en una dimensión lingüística y en una dimensión arquitectónica y heráldica: “la mentira de la “senyera catalana" y la mentira de la Barcelona “histórica”.
1.- LA MENTIRA DE LA CATALUÑA HISTÓRICA
En el año 777, España o Al-Andalus está ocupada prácticamente toda por los árabes. El Califa de Zaragoza, Solimán el Arabí, se ve amenazado por el Emir Abderramán I que pretende apoderarse de Zaragoza, motivo por el que solicita el apoyo del rey franco, Carlomagno, a cambio de firmar un pacto de “marcar” los territorios Carolingios (la Francia actual) y los del Imperio de Al-Andalus de Hispania. Con este pacto, Carlomagno cruza los pirineos hacia el sur y amplia sus dominios en Hispania (por ello la “Marca Hispánica”), en este lado de la cordillera Pirenaica, y a demás crear una serie de fortalezas militares con el fin de frenar el avance Musulmán hacia lo que es la Francia actual.
Aprovechando Carlomagno el pacto con el Califa Solimán el Arabí, conquista a los musulmanes las plazas de Gerona, Barcelona, Urgell, Besalú, Conflent, los Valles y así hasta nueve condados. Estos condados formaron la conocida como “Marca Hispánica” franco-carolingia y fue gobernada por Carlomagno y sus descendiente en la corona francesa desde el año 801 hasta que el rey de Francia, Luis IX, firmara el Tratado de Corbeil con el Rey de Aragón, Jaime I, en el año 1258, momento en que estos condados franceses (hoy Cataluña) que formaban la