martes, 11 de diciembre de 2012

IBIZA: Así te destruye la metanfetamina, la droga más peligrosa del mundo


  • Se calcula que calcula que cada año más de 150.000 personas prueban por primera vez esta sustancia. La edad media de inicio en el consumo es 19,1 años.
  • El uso prolongado provoca un deterioro físico progresivo y altera el funcionamiento del cerebro disminuyendo el rendimiento motor y deteriorando en el aprendizaje verbal.

Roberto Arnaz



Methcristalmetahielo o tiza, la metanfetamina tiene muchos nombres y un sólo final: la destrucción personal y, eventualmente, la muerte. La familia de Shawn Bridges lo sabe bien. Su hijo falleció en 2007 después de más de una década enganchado a la que muchas organizaciones sanitarias y publicaciones científicas, entre ellas la prestigiosa revista Lancet, consideran la droga más peligrosa del mundo
Como en muchos otros casos de adictos a cualquier sustancia estupefaciente, un drama familiar fue el causante de que Shawn buscase refugio en
la metanfetamina. El atropello mortal de su hermano pequeño le sumió en una profunda depresión y le empujó a la droga. Era aún un adolescente, pero ya era incontrolable.
Dejó los estudios y su único pasatiempo era colocarse con los pocos dólares que ganaba en trabajos temporales. A los 26 años sufrió su primer infarto.Durante unos meses se desenganchó e incluso encontró un trabajo como camionero junto a su padre, Jack. Duro poco. Shawn volvió a engancharse al cristal y su vida terminó por derrumbarse progresivamente. 
A los 30 años el deterioro físico era brutal. De ser un hombre corpulento, Shawn pasó a ser una sombra de si mismo. Un par de años después apenas podía moverse y valerse por sí mismo. Con apenas 34 años pasaba sus últimos días en una cama de hospital de la ciudad de Cape Girardeau, en San Louis (Missouri), en un estado semi catatónico e inmóvil.
“Tiene 34 años pero su cuerpo es el de una persona de 80 años”, se lamentaba su padre frente a la cámara del realizador estadounidense Chip Rossetti, que retrató la agonía de Shawn Bridges y el horror de los estragos que causa la metanfetamina en su exitoso documental 'No more sunsets' (2007).
Droga de moda 
En Estados Unidos hay quien culpa del renovado auge de la metanfetamina a la serie de televisión 'Breaking Bad', en la que un aplicado profesor de instituto -padre de un joven discapacitado y marido de mujer embarazada- decide convertirse en traficante de drogas para asegurar el futuro de su familia tras ser diagnosticado con cáncer pulmonar terminal.
La televisión es una poderosa influencia para los jóvenes y, aunque no hay estudios que lo demuestren, quizá ese factor tenga algo que ver en que la edad media de las cerca de 150.000 personas que se inician en el consumo de esta sustancia cada año sea de 19,1 años, según los datos del Servicio de Abuso de Sustancias y Salud Mental de EEUU (SAMHSA, según sus siglas en inglés).
Esta edad de inicio en el consumo se ha ido reduciendo progresivamente desde los 22,2 años de 2006. Actualmente se calcula que hay más de 1,9 millones de personas en todo el país enganchadas a ese dañino polvo blanco, cristalino, inodoro y amargo que se disuelve fácilmente en agua o alcohol y que se puede fumar, inhalar, inyectar o tomar de forma oral.
Dramáticos efectos secundarios
La metanfetamina fue sintetizada por primera vez en Japón, en 1919. Sin embargo, sólo comenzó a comercializarse casi dos décadas después, en 1938, con el nombre de Methedrina y se empleaba como descongestivo nasal o en inhaladores bronquiales, además de como droga estimulante para el sexo.
Durante la Segunda guerra mundial fue utilizada tanto por los Aliados como por el Eje para estimular a sus tropas, pero en 1971 la Convención Internacional de Psicotrópicos la incluyó en la lista de sustancias prohibidas.
Se trata de una droga muy poderosa. Actúa cambiando la manera en que funciona el cerebro. También acelera muchas de las funciones del cuerpo. Sus efectos pueden durar hasta 6 o 12 horas. La metanfetamina bloquea las señales somáticas, como la fatiga, el sueño o el hambre, que advierten sobre el deterioro funcional progresivo.
Por eso los adictos a esta sustancia pueden permanecer despiertos durante varios días, lo que genera un creciente agotamiento físico, psicológico o cognitivo, y provoca paranoia, agresividad y alucinaciones
El abuso crónico de la metanfetamina cambia de forma significativa el funcionamiento del cerebro. Disminuye el rendimiento motor y causa un enorme deterioro en el aprendizaje verbal.
Además, los estudios han concluido que el consumo prolongado también revelacambios graves de estructura y función en las áreas del cerebro asociadas con las emociones y con la memoria, como le sucedió a Shawn Bridges y a las decenas de miles de personas que cada año fallecen por culpa de la denominada 'droga más peligrosa del mundo'.