sábado, 7 de agosto de 2010

UPyD relaciona la corrupción y el declive del turismo balear


Las informaciones que durante estos días están apareciendo del sumario del escándalo del IBATUR reflejan el abuso y el mal uso que se ha venido haciendo del dinero público destinado a la promoción turística. 
Resulta muy triste comprobar, en vista del declive en el que anda sumido el turismo balear, nuestro principal pulmón económico, el modo en que los gobernantes del PP durante la pasada legislatura y los de UM –con el beneplácito del Pacte- en la actual presuntamente han malversado unos dineros que tenían que destinarse fundamentalmente a proyectar nuestra imagen turística en el exterior. 

La corrupción ha afectado tanto a IBATUR como a INESTUR, los dos institutos turísticos hasta hace poco, demostrándose que a los partidos tradicionales, desde el PP hasta el conglomerado del Pacte, no les importa arruinar cualquier buena idea para hacer un uso torticero de ella si ello
significa untar a sus clientelas partidarias y electorales.
El problema es que la Consejería de Turismo, estando en manos de PP y UM, no ha invertido adecuadamente unos dineros que tenían como misión salvar un modelo turístico que está enviando desde hace años señales de agotamiento. 

El PP y UM han estado jugando con las cosas de comer, curiosamente los mismos partidos que alardean de defender el turismo de calidad. 
Basta ver en qué ha resultado la apuesta del PP por la organización de torneos de golf en Pula Golf –más de 17 millones de euros en ayudas públicas- y el fiasco de IB-Blau en defensa del turismo náutico. 
Es una ironía cruel del destino que quienes han jugado con las cosas de comer sean los dos partidos que se las dan de "liberales" y que en su propaganda se subrogan una y otra vez el papel de buenos gestores de la economía balear frente al desastre del Pacte. 
Los ciudadanos tienen que abrir los ojos y empezar a sospechar que la verdadera alternativa al Pacte en materia económica no la representa el PP de IBATUR ni tampoco la UM de INESTUR, sino un partido nuevo como UPyD, que entiende de otra forma el interés general.

            UPyD entiende que la ciudadanía tiene que reflexionar hasta qué punto el hundimiento del turismo británico, el acortamiento de la temporada turística, la baja ocupación hotelera y la caída de ingresos de las últimas temporadas se ha debido a la malversación -unida a su ineficacia- que se ha producido en los dos institutos turísticos que para el 2010 tenían un presupuesto de 42 millones de euros. Nuestros políticos están jugando con las cosas de comer y la corrupción ligada a la promoción turística, además del descrédito exterior que proyecta, no es una causa secundaria del deterioro del turismo en las Islas Baleares.